domingo, 26 de abril de 2015

Guadalajara, siglos XVI-XX una ciudad castigada

Guadalajara en el siglo XVII

Esta época corresponde a una etapa de decadencia política, social y económica pese a ser la mejor época cultural de España conocido por siglo de oro.

Guadalajara en éste período experimentara un retraso demográfico importante provocado principalmente por el movimiento de la nobleza de la ciudad a la capital de España, para poder ocuparse de los asuntos de la corte. Es en esta época cuando se realizan reformas en el palacio del infantado y donde se edificará el panteón antes mencionado.

En esta época Guadalajara contaba con una población de 2000 casas lo que podría equivaler a unos 10.000 habitantes. Sin embargo esta población mermara notablemente tras hechos como el descubrimiento de América, la expulsión de los moriscos o el movimiento de la nobleza a Madrid. Importante fue este movimiento ya que de toda su población en torno a un 3% eran hidalgos y un 20% dependía directamente de esta esfera de ralengo en la ciudad, como sirvientes, clero adjunto y trabajadores.

Guadalajara en el siglo XVIII

Es en esta fecha cuando se produce el cambio de dinastía en España y debido a que Guadalajara apoyo a los Borbones este les anularía la deuda que tenía con la monarquía y mando construir en ella una Real Fábrica de Tejidos que mejorara la ciudad en esta época aunque el declive era ya enorme en la ciudad donde la población había pasado a unos 2000 habitantes aproximadamente tras la guerra.

Edificios de esta época son :
La Real Fabrica de Tejidos que se encuentra frente al palacio del infantado donde se encontraba el palacio de los marqueses de MontesClaros y que posteriormente paso a ser la academia militar de ingenieros.
14 conventos contaba Guadalajara, de los más importantes el de Las Carmelitas que sigue en pie, en la calle ingeniero Mariño. El convento del Carmen es de esta época, al lado de la plaza del jardinillo.

Guadalajara en el siglo XIX

En esta época Guadalajara continuará en su etapa de decadencia. Como reflejo de esta decadencia el estado en el que se encontraba el palacio del infantado, insignia de la ciudad que había albergado dos bodas reales en el pasado y donde numerosos grandes de España se habían hospedado estaba completamente deshabitado y descuidado. Los duques del infantado a parte de perder el apellido Mendoza que tanta fama les dio ya no tenían apenas apego a Guadalajara y debido a los cruces con otras familias nobles de España habían heredado grandes fortunas y otros títulos nobiliarios con los que los que tenían que ver con Guadalajara habían pasado a un segundo plano.
En esta época se gestará la guerra de la independencia, suceso que traerá con si más desgracias si caben a la ciudad de Guadalajara. Unos años después de la guerra la ciudad contaba con unos 5000 habitantes y unas 1300 casas, reduciéndose a casi la mitad la extensión de la ciudad en dos siglos, cosa casi inaudita entre las ciudades que una vez fueron importantes en la política española. Y la provincia cerca de 150.000 siendo el núcleo duro de la comarca rural.

Otro hecho más es la reducción de iglesias pasando de 15 que llego a tener a 9 y 14 conventos que se mantendrían, salvo el de los jesuitas que fue abandonado tras la expulsión de la orden años atrás.
Debido a la reducción de población se eliminaron 4 iglesias de las 9, San EstebanSan Andrés, San Miguel y Santo Tome, quedando solo 5. Si bien Santo Tome se convertirá en la capilla de Nuestra Señora de la Antigua, patrona de la ciudad de Guadalajara en la actualidad. Si bien San Miguel desapareció, la capilla anexa que mando construir Luis de Lucena con posterioridad quedo intacta y es uno de los símbolos de nuestra ciudad en nuestros días.


Iglesia de San Miguel y capilla Luis de Lucena(izda, sup), interior(sup. dcha.), grabado y actualidad (inferior)
Además es aquí cuando se realiza una reforma en la antigua Real Fabrica de Tejidos o fábrica de Paños para pasar a ser la Academia de ingenieros en las que tantos logros se gestarían en años posteriores, lugar donde habia estudiado el verdadero inventor de la radio, Julio Cervera Baviera que consiguió enviar la voz humana entre Alicante e Ibiza en 1902, 11 años antes que Marconi.

En este siglo el legado de los duques del infantado pasara a la casa ducal de osuna ya que el duque muere sin descendencia. Este nuevo duque Mariano Telléz se despreocupara totalmente de su legado en Guadalajara y sal morir este también sin hijos sus títulos pasaran a la familia de los Arteaga que son los actuales dueños del palacio del infantado.

En esta época aún quedaban muchos palacios en pie del a época como el de Davalos (actual biblioteca de Guadalajara), los condes de Coruña (destruido junto al banco de España), el de la cotilla (escuela de música y museo actualmente) y otros más que fueron demolidos. Las familias más notables en este período fueron los condes de la Vega del Pozo que tenían su palacio en el actual colegio de Maristas de Guadalajara. Además poseía todo el monte del Sotillo al sur de Guadalajara. Su hermana mayor fundo la orden de Adoratrizes que extendió por varios países.  Actualmente se conserva todo lo que construyo teniendo un colegio con el nombre de la orden y un panteón donde reposan sus restos y que es un símbolo de Guadalajara, construido por Velazquez Bosco.
Vista panorámica del complejo de Adoratrices
Panteón de la duquesa de Sevillano, frontal (izqda.), frescos de la cúpula y cripta (dcha.).
Iglesia de Santa Micaela en el complejo de Adoratrices, panteón a la izquierda y colegios a la derecha


Bibliografía

Historia de Guadalajara - Antonio Ortiz, 1998

La época dorada de Guadalajara, siglos XIV -XVI

Guadalajara en tiempo de los Reyes Católicos

Está época esta claramente marcada por la influencia del cardenal Mendoza y su clan en el que acumulan un gran poder político. En gran parte gracias a la ayuda a las guerras en las que embarcaba Castilla, como la toma de Granada y ya con Carlos V y Felipe II en algunas más campañas.
En esta época la ciudad cambia completamente de cara, apareciendo multitud de palacios y casas solariegas debido a la gran cantidad de nobles que habitan en ella. Prueba de ello es El Palacio del Infantado levantado en esta época y atribuible al gran poder de los Mendoza, además la expulsión de los judíos en España dará lugar a un cambio en gran parte de la ciudad.

Palacio del Infantado en torno al s.XVI - Fachada (sup. izqda), patio (sup. dcha), planta superior del patio (inf. izqda.) y sala de los cazadores (inf. dcha.)



Patio Palacio de Antonio Mendoza
Frente a la iglesia de Santa Maria se  situaria el palacio del cardenal Mendoza (Pedro de Mendoza), edificio que desapareció y que era una de las obras de referencia de la ciudad del renacimiento en España. Cerca de este se encontraba el de su sobrino, Antonio de Mendoza, conservado actualmente que funciona como un instituto de enseñanza secundaria, Liceo Caracense, como se puede observar en la imagen de la derecha. 
A la muerte de éste fue legado a su sobrina que convertiría el palacio en un convento, y en el que se edificaría junto a el una capilla. En el queda enterrada y queda su nombre como capilla del convento de la piedad (img dcha).


Capilla de la Piedad junto al palacio de A.Mendoza (izqda), portada y patio palacio por 1940 (abjo dcha).





Cabe resaltar que este palacio actualmente alberga el famoso escudo del emperador Carlos de Habsburgo que en un principio era símbolo de sometimiento en las ciudades castellanas que se opusieron a ciertos impuestos. Esto sucedio en la guerra de los comuneros en los que la comarca de Castilla perdio sus privilegios y fueros y en los que Carlos V, como se le conoce debido a su título de emperador, unico rey en España poseedor de tal título comprado "a base de talonario" a los estados que poseian voto, que iban desde Holanda a estados pequeños de Alemania pasando por las regiones del Norte de Italia.


Escudo Imperial Carlos V
Este escudo en un principio fue colocado en la puerta del Alcazar que es de donde partió la revuelta en el siglo XV y donde fueron ejecutados sus instigadores. El mejor ejemplo de este escudo se encuentra en la puerta de la Bisagra en Toledo, ciudad que protagonizo el mayor alzamiento contra Carlos V y donde este asentaría su residencia finalmente. Posteriormente tras la destrucción del alcázar pasaría a ser colocado en  la puerta del Mercado de Guadalajara que se encontraba en la actual plaza de Santo Domingo. Una vez destruidas las murallas en el siglo XVIII para ampliar la ciudad fue guardado en el convento de la Piedad para ser protegido de futuros acontecimientos. Gracias a ello hoy en día se conserva en muy buen estado y puede ser observado por los pocos curiosos y turistas que conocen su ubicación.


Iglesia-Fuerte de San Francisco
De todos los palacios solariegos de la familia Mendoza, solo quedarán pues el palacio del infantado y el palacio de Don Antonio de Mendoza. Cabe destacar que para salvar los restos de toda esta dinastía de duques y honrarles fue de construido un panteón. Este se encuentra en la iglesia de San Francisco, lugar de grandes acontecimientos en la ciudad de Guadalajara que fue construido en torno al año 1200 para la orden de los caballeros Templarios. Tras un incendio seria restaurado por Don Diego Hurtado de Mendoza, primer duque del Infantado quien posteriormente encargaría su mantenimiento a su linaje y siglos mas tarde se construiría el citado panteón. Este panteón guarda una gran similitud al de los reyes del real Monasterio del Escorial, si bien sus dimensiones son mucho mas reducidas. Tras la toma de Guadalajara por los franceses en torno al año 1808 será profanado y gravemente dañado. Recientemente ha sido restaurado por un importe que ha rozado el millón de euros y los restos de los duques que fueron movidos al palacio de Pastrana han sido devueltos a su sitio original. 

Cripta de los Duques del Infantado antes (sup.) y despues de la restauracion (inf.)


Este hecho forma parte más del gran interés de algunos guadalajareños de intentar incentivar el turismo en una ciudad que ha sufrido una desafortunada cadena de desastres a nivel urbanístico, guerras y actuaciones interesadas a lo largo de su historia. Aunque cueste de creer la mayor parte han sido en los dos el último siglo.


Bibliografía

Historia de Guadalajara - Antonio Ortiz, 1998

domingo, 12 de abril de 2015

Guadalajara, el siglo XX, levantando una ciudad

Guadalajara a principios del siglo XX

A diferencia de otras ciudades, a comienzos de este siglo es una de las ciudades más tranquilas, sin eventos relevantes. Las razones pueden estar en el carácter militar de la ciudad ya que cuenta con La Academia Militar de Ingenieros, el Cuartel de San Carlos, El Cuartel de Globos, el Fuerte de San Francisco, y en el ámbito político el control de la vida local por el Conde de Romanones, cacique local de la época. Este señor era hijo del Marques de Villamejor, que destacaba por su gran riqueza y por su gran influencia en España, habiendo sido alcalde de Madrid en dos ocasiones y presidente del Senado.


Vista Aerea de Guadalajara, Cuartel de San Carlos (sup. dcha.), academia de ingenieros (inf. izqda).




Todos los edificios militares serán destruidos en la guerra civil española y no se llevará a cabo su restauración salvo la academia de ingenieros frente al palacio del infantado. Además se destruiría buena parte de la muralla que sería casi eliminada con posteriores alcaldes de la época franquista, quedando en la actualidad un pequeño resto de la muralla original frente al Torreón de AlvarFañez. En el plano económico cabe destacar la Fabrica de automóviles Hispano Suiza gracias a los amaños de contratos del famoso Conde. También aconteció el incendio de la academia militar en el año 1924 que supuso un gran golpe a la industria alcarreña.




Guadalajara tras La Guerra Civil Española

En la guerra civil, Guadalajara fue una de las ciudades que mas desgaste sufrió. El palacio del infantado, símbolo de glorias pasadas fue incendiado por los bombarderos de la aviación alemana tras errar el blanco en el cuartel de San Carlos que sería completamente destruido. Varios edificios importantes fueron así mismo destruidos, sin embargo el palacio del infantado sería restaurado tras la guerra Civil. Guadalajara fue una de las pocas ciudades en las que el ejercito republicano aguanto el envite de las tropas nacionales. Tras el sublevamiento de varios generales encabezados por Manuel de Zarate sería rápidamente recuperada así como ciudades próximas a Madrid. Sería una de las ciudades que mas tiempo estuvo del lado republicano, y no se libraría de los horrores de la guerra.

Debido a ser de las últimas ciudades en caer la ciudad no fue apenas apoyada por el régimen de Franco y sería una de las ciudades donde se pasaba hambre tras al guerra. En este tiempo la ciudad apenas contaba con 15.000 habitantes.

Fue a partir de 1950 cuando Guadalajara iniciaría un incremento paulatino de la ciudad, expandiendo la ciudad mas al sur, a partir del Paseo de las Cruces. Dotando a la ciudad así mismo de un centro sanitario bien equipado y todo esto bajo el mandato de Pedro San Vazquez, médico y alcalde de Guadalajara que influyo bastante en el recuperación de la ciudad. Se reformaría la plaza de toros, punto de referencia en los festejos de la ciudad.

Sera a partir de 1960 cuando Guadalajara experimente un cambio sustancial de población, doblando su población en apenas 20 años. Alcanzando los 60.000 habitantes en 1980. Este hecho se debe en gran medida al despoblamiento de los núcleos rurales. En estas décadas se extenderá por el sur hasta la carretera Madrid Barcelona, construyéndose multitud de edificios de varias plantas desde el paseo de las cruces. Se empezará a ensanchar la ciudad con grandes avenidas como la de Castilla y la del ejercito.

Se edificara un nuevo hospital más allá de la A2, carretera que une Guadalajara con la capital, con recursos de los más avanzados de aquel entonces. Debido al crecimiento de Madrid, Guadalajara pasará pronto a ser una ciudad de carácter residencial, estando a 60 minutos de Madrid ya sea mediante automóvil o mediante la linea del tren que dispondrá de una red de de cercanías al igual que otras capitales de provincia anexas como Segovia o Toledo.

Este hecho hace que Guadalajara no haya sabido adaptarse a estos tiempos en cuanto a industria se refiere, contando con un par de polígonos industriales. Actualmente la unión entre Madrid y Guadalajara es uno de los núcleos fuertes de la industria en España, conocido como el corredor del Henares. Dentro de la provincia de Guadalajara es donde se encuentra el 80% de la población actual.


Ayuntamiento de Guadalajara en los años 50 y vista actual
Al comienzo de la transición democrática muchas de las calles de Guadalajara cambiarán de nombre y muchos lugares cambiarán su aspecto como el ayuntamiento de Guadalajara o la plaza de Santo Domingo, siendo eliminados numerosos espacios arbolados y sustituidos por granito o adoquines como la plaza del ayuntamiento.

Habrá edificios como la antigua cárcel de Guadalajara que dejaran su uso a finales del siglo XX.




Antigua Cárcel de Guadalajara
Plaza de Santo Domingo, San Gines al fondo























Bibliografía

Historia de Guadalajara - Antonio Ortiz, 1998
Fotos Archivo de Guadalajara.